Redescubrir tus lugares habituales.

Es importante practicar millones de veces en el mismo sitio (un lugar que nos agrade, próximo a nuestro domicilio, por ejemplo). Utilizar nuestra infinita creatividad como medio de encontrar nuevas visiones de lo que vemos todos los días. Y repitiendo, repitiendo, detectar nuestros errores y corregirlos.

Además nos ayuda a aprender a trabajar con diferentes tipos de luz, en función de la hora del día y del tipo de climatología.

Ver cuales son nuestros puntos fuertes y débiles. Un solo lugar puede ser un campo de práctica perfecto para acostumbranos al proceso de crear nuevas enfoques, que aplicaremos en futuras experiencias fotográficas.

0 comentarios: